Aspectos a tener en cuenta al incorporar impresoras 3D en el aula

Imagen extraída de: http://3dprint.com

Según el sitio Educación 3.0, existen varios aspectos que los docentes deben tener en cuenta al planificar la incorporación de impresoras 3D en el aula, entre los cuales se encuentran:




– Seguridad: un aspecto que es sumamente importante, sobre todo si se trabaja con niños pequeños, ya que las impresoras 3D trabajan a temperaturas altísimas (unos 200 grados), por lo que se debe tener especial precaución evitando que toquen mientras se encuentra en funcionamiento. Es aconsejable también en el caso de que se pueda decidir al respecto de que impresora incorporar al aula, decidir por los modelos que tienen diseño cerrado.




– Materiales: qué material elegir para hacer la impresión? Puede ser el plástico ABS o el PLA. Ambos se pueden utilizar en el entorno educativo,  el primero es el mismo en el que están hechas las piezas de Lego, se puede reciclar y reutilizar y permite que las piezas se peguen, mientras que el segundo es ecológico, aunque es más difícil de trabajar después de la impresión, y se degrada con el tiempo. Algunos modelos de impresora permiten utilizar ambos indistintamente. Seguramente la elección de uno u otro, será realizada teniendo en cuenta disponibilidad, costos y los objetivos didácticos.




– Facilidad de uso: Si bien muchos consideran que imprimir en 3D es una tarea fácil, es recomendable en el caso de poder elegir, optar por aquellas que permitan el mejor ajuste (que tenga automatizada la calibración por ejemplo) y un ahorro de tiempo por parte del docente. También conviene prestar atención al software de funcionamiento: que sea intuitivo, fácil de utilizar y que tenga las opciones básicas para realizar cualquier ajuste.




– Precio: Este es uno de los aspectos más importantes a la hora de pensar en la incorporación de este recurso en la enseñanza. En mercado libre por ejemplo, se encuentran publicadas desde los $15000 ARS hasta los $95000 ARS, por lo cual, no todas las instituciones educativas estarían en condiciones de poder incorporarlas a la vida estudiantil.

En conclusión: la impresora 3D es un recurso altamente aconsejable para su utilización en las escuelas, ya que permite trascender los límites de la creatividad y la posibilidad de materializar múltiples elementos. Aunque en la actualidad los precios son muy elevados, día a día se intentan desarrollar opciones más económicas. Por lo cual, esperamos que pronto sean una realidad en la mayor cantidad de instituciones. 







0 comentarios:

Publicar un comentario